Boletín del
Ayuntamiento de Getafe
(1999)

Periódico Mercado de Getafe
(2000)

El Pais
(1999)

"Aire" sería nuestra palabra más cercana al significado de la palabra china que originalmente da nombre a esta nueva publicación: Qi, cuyo interés principal es al compromiso con el presente para abordar bien el futuro. En su debú, Qi presenta posía y artículos relacionados con el replanteamiento de los procesos culturales, el imaginario neoliberal y los intelectuales y la política.

Sus componentes están empeñados en fomentar la participación y la reflexión cultural de la localidad, y para ello cuentan con la colaboración de la Universidad Carlos III. El Ayuntamiento les presta apoyo en cuanto a concesiones de espacios para las presentaciones, pero reivindican más ayuda, especialmente económica. Con una periodicidad en principio anual, actualmente quieren mantenerse en la semestral, con el mismo precio de cinco euros. “Poner dinero de nuestro bolsillo es un gran obstáculo pero estamos muy orgullosos de los logros”, recalca Cuevas.

Una revista hecha por todos
Lejos de la pretensión de ser un círculo selectivo e inaccesible, Qì otorga protagonismo a las colaboraciones externas y a los autores nóveles. El mecanismo mediático del siglo es Internet y los componentes de Qì se valen de esta arma como captadora de autores noveles que quieran participar.

Vía mail se fija un tema, este número Identidades, y empieza la labor comunicativa e investigadora. “Internet se trata de un medio importante de difusión. La gente confía en un proyecto abierto y en las colaboraciones espontáneas. En el plano teórico queda muy bien eso de decir que estamos abiertos a la participación, pero es algo totalmente real y cierto. No se trata sólo de peticiones sino de colaboraciones espontáneas, que es lo que le da sentido a nuestro proyecto. Son los colaboradores quienes toman la iniciativa, no hay nada impuesto”. La página web es el espacio más importante para el contacto con el público y darse a conocer masivamente, así como los envíos gratuitos que realizan a personas capaces de aumentar la repercusión de la misma, o ámbitos académicos en los que pueda abrirse un hueco. Asimismo el consejo de redacción se reúne cada quince días en casas particulares, cafeterías o casas regionales que les celen sus salas para reflexionar y poner en común ideas.

No pueden quejarse de la respuesta y acogida del público, pero Cuevas puntualiza que “pese al tiempo que llevamos, da la sensación de que estamos empezando porque esto es un día a día. Tener un caráctter popular es muy difícil tal y como está el mercado de la distribución. Nosotros trabajamos en equipo con Traficantes de sueños, que es una alternativa independiente para nuestra distribución y se encuentra en nuestra línea”. A lo largo de estos ocho números han dedicado temas al fin del milenio, las utopías, la estética digital u Oriente, entre otros. Ahora Qì profundiza en el sentido de la identidad en la cultura. “Es un tema muy candente no sólo políticamente sino social, cultural, como construcción del individuo desde el colectivo… Nacemos cuando se nos da la identidad y conseguimos crearla” señala Cuevas. Asegura que es el devenir de los tiempos y las historias que nos construyen, lo que ha hecho que elijan el tema Identidades para este número. Se trata del regreso a la esencia, donde encontrarse a uno mismo despojado de máscaras.

La presentación del número 8 tendrá lugar en la galería que más dARTE. Un acto amenizado con imágenes que se han publicado a lo largo de todos los números, así como algunos de los textos incluidos en Identidades. “Esta galería es un proyecto cultural que nos parece muy interesante, así que le encontramos mucho sentido a que se presente en la misma —comenta Cuevas—. Somos sociales y por ello necesitamos establecer redes de esencias comunes, identificarnos mediante el espacio, los gustos, las lecturas, las modas, las actitudes, las visiones de mundo, la ideología, la cultura”. (Marzo 2006)